Incremento de la demanda: Sistemas de vigilancia y seguridad en foco.
Por Andrea Ochoa Restrepo
En la actualidad, la economía mundial está experimentando una desaceleración gradual, pero el panorama futuro es incierto. Para controlar la inflación a nivel mundial, se están llevando a cabo ajustes fiscales y monetarios, cuyos efectos en el crecimiento económico aún son inciertos. Existe incertidumbre sobre si la economía estadounidense logrará un aterrizaje suave, es decir, reducir la inflación sin causar recesión, y hay desacuerdo en este tema.
Efectivamente, los primeros meses de 2023 han arrojado resultados relativamente positivos, lo cual ha llevado al Fondo Monetario Internacional (FMI) y al Banco Mundial (BM) a elevar levemente sus proyecciones de crecimiento económico global para este año al 3 % y 2,1 %, respectivamente, comparado con las estimaciones anteriores de 2,8 % y 1,7 %. Sin embargo, las perspectivas para 2024 se han ajustado ligeramente a la baja.
El contexto económico actual ha exigido un ajuste fiscal y monetario para contener la intensa ola de inflación mundial posterior a la pandemia. Este ajuste ha generado diversas opiniones y predicciones sobre los posibles costos para el crecimiento económico en los próximos meses. La incertidumbre prevalece en torno a cómo estas medidas afectarán el panorama económico a corto plazo, y las proyecciones para 2024 reflejan la cautela ante los desafíos que aún persisten.
Además, surgen preocupaciones sobre el futuro de la economía china, especialmente en su vasto sector de construcción y residencial, indicando que no continuará creciendo al ritmo de décadas anteriores. En este contexto, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) han ajustado ligeramente al alza sus proyecciones de crecimiento económico global para este año, pero han revisado a la baja las expectativas para 2024.
En términos de estabilidad macroeconómica a corto plazo, se observa una mejora en el equilibrio de la cuenta corriente, ya que su déficit ha disminuido del 6 % del PIB en 2022 al 3,5 % en 2023. Aunque esto podría sugerir una menor vulnerabilidad, la situación no puede considerarse positiva.
Es preocupante destacar la marcada caída en las importaciones de bienes de capital, lo cual está en línea con la pronunciada contracción observada en la inversión interna, que ha disminuido en un 15,5 % en el primer semestre. Este fenómeno plantea serias interrogantes sobre nuestro crecimiento potencial futuro. La inversión en bienes de capital es crucial para el desarrollo y la capacidad productiva a largo plazo, y su declive indica posibles obstáculos para el crecimiento económico sostenido.
Finalmente, los mercados financieros, que capturan la coyuntura y buscan anticipar la evolución futura de la economía, viven meses de incertidumbre. En lo que respecta a la economía estadounidense, se observa un aumento notable en las proyecciones, destacando un incremento de 0,6 puntos porcentuales (pp.) según el Banco Mundial y de 0,7 pp. según el Fondo Monetario Internacional (FMI). Esta tendencia al alza también es respaldada por otras estimaciones, incluyendo la de la Reserva Federal de los Estados Unidos, que, en su Summary of Economic Forecasts de septiembre, previó un crecimiento del 2,1 % para 2023, lo cual representa un aumento de 1,1 pp. con respecto a su estimación de junio.
Después de una breve recesión técnica en el primer semestre de 2022, ha habido un debate sobre si la política monetaria estadounidense lograría su objetivo de llevar la tasa de inflación a una meta del 2 % sin desincentivar la actividad económica lo suficiente como para generar una recesión. La actual posición de la Reserva Federal se basa en la idea de que es posible reducir la inflación sin provocar una recesión, una perspectiva conocida como "aterrizaje suave" o "soft landing" en inglés. Este enfoque sugiere la posibilidad de mantener la estabilidad económica sin comprometer el crecimiento.
Una perspectiva quizás menos optimista, pero con una dirección similar, proviene del panel de economistas que son objeto de encuestas mensuales por parte de The Wall Street Journal. La probabilidad de que ocurra una recesión en los próximos doce meses, según este panel, ha experimentado una disminución constante, pasando del 63 % en septiembre de 2022 al 54 % que observamos en la actualidad.
Mercado de seguridad electrónica
Según el estudio de mercado desarrollado por Mordor intelligence “Se proyecta un aumento significativo en el tamaño del mercado de seguridad electrónica, pasando de 52.37 mil millones de dólares en 2023 a 76.24 mil millones de dólares para 2028, con una tasa de crecimiento anual del 7.8 % durante el período de pronóstico (2023-2028). La pandemia de COVID-19 ha impulsado la demanda de soluciones de seguridad electrónica, destacando la importancia de tecnologías esenciales para respaldar la continuidad comercial. En la India, el crecimiento de la digitalización durante la pandemia ha generado una necesidad significativa de sistemas de seguridad electrónica”.
Los gobiernos están invirtiendo en reducir la creciente tasa de delitos a nivel mundial. La implementación de sistemas de vigilancia masiva ha ayudado a rastrear a los sospechosos. Un lector de matrículas (LRP) en las carreteras está aumentando en respuesta a la conducción insegura. Según el informe NHTSA 2021, la tasa de mortalidad para 2021 fue de 1.33 por cada 100 millones de millas recorridas en vehículos. La causa principal de tales muertes de vehículos motorizados es el exceso de velocidad.
Además, ante el incremento de casos de violaciones de seguridad y situaciones de riesgo físico, se anticipa un aumento en la demanda de sistemas de vigilancia y seguridad. Un ejemplo revelador es la reciente encuesta llevada a cabo por Pro-Vigil, una empresa especializada en videovigilancia, que indicó que el 28 % de los encuestados experimentaron un aumento en incidentes físicos en 2021, en comparación con el 20 % registrado en la encuesta del año 2020. Un porcentaje significativo (27 %) de los participantes incluso proyecta un continuo incremento de estos incidentes en el presente año.
La encuesta subraya que más empresas están recurriendo a servicios de monitoreo remoto de video (RVM) como una forma eficaz y rentable de proteger sus activos y sitios. Sin embargo, se destaca que la mayoría de los usuarios no están aprovechando completamente las capacidades de estos servicios más allá de la simple vigilancia de seguridad.
En contraste, y conforme a un informe de la consultora Markets and Markets, se proyecta un crecimiento anual del 8,3 % en el mercado de monitoreo de alarmas en Latinoamérica hasta el año 2025. Este informe también anticipa que dicho mercado alcanzará los 7.500 millones de dólares para ese año. La cifra mencionada engloba todos los ingresos generados por los servicios de monitoreo de alarmas en diversos segmentos de mercado en la región, como seguridad residencial, empresas pequeñas y medianas, grandes corporativos, infraestructuras críticas, localización y seguridad personal, así como otras aplicaciones de seguridad.
El valor de los 7.500 millones de dólares también comprende los ingresos derivados de la venta de equipos de seguridad, así como los ingresos provenientes de servicios como instalación, mantenimiento y soporte técnico vinculados a los sistemas de monitoreo de alarmas. Es esencial destacar que esta cifra también abarca elementos integrados a los sistemas de monitoreo, como asistentes inteligentes, domótica e Internet de las cosas (IoT), señalando claramente la inclusión de nuevos dispositivos tecnológicos en la evolución de los sistemas de seguridad.
¿Y el mercado de monitoreo?
En México, las perspectivas para el mercado de monitoreo de alarmas apuntan a alcanzar los 1.000 millones de dólares para el año 2025, según revela un informe de la consultora Frost & Sullivan. Este crecimiento se atribuye a la creciente adopción de tecnologías inteligentes y a la demanda en aumento de servicios de monitoreo de seguridad, especialmente en el ámbito residencial y para pequeñas y medianas empresas.
Importaciones de equipos de seguridad electrónica a México de enero de 2023 a octubre de 2023
En Colombia, de acuerdo con un informe de la consultora Research And Markets, se proyecta que el mercado de seguridad electrónica, que abarca servicios de monitoreo de alarmas, alcance los 250 millones de dólares para el año 2024. La preocupación por la seguridad personal y empresarial, así como la incidencia de robos, impulsan la demanda de estos servicios, anticipándose un crecimiento anual compuesto del 6,3 % durante el período 2019-2024.
Importaciones de equipos de seguridad electrónica a Colombia de enero de 2023 a octubre de 2023
Ecuador ha experimentado un notable crecimiento en el mercado de servicios de monitoreo de alarmas en los últimos años. Conforme a un informe de QY Research, se espera que este mercado alcance los 143 millones de dólares para el año 2026, con una tasa de crecimiento anual compuesta del 8,7 % durante el período 2021-2026. La expansión de las zonas urbanas y la creciente urbanización también contribuyen al impulso de la demanda de soluciones de seguridad.
En el contexto de Centroamérica, un informe de la consultora Markets and Markets pronostica un destacado crecimiento en el mercado de seguridad electrónica, con una tasa compuesta anual del 10,2 % entre 2020 y 2025. Este crecimiento sobresaliente destaca la creciente importancia de soluciones de monitoreo de alarmas en la región.
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